para no perder el autobús
ya podría esperar él por una vez
a que me termine este café de lunes
que me sabe a mierda por más azucar que le echo
si algo hay que perseguir, prefiero perseguir mis pesadillas
agarrarlas por el cuello y besarlas en la boca
porque no hay nada tan urgente en la ciudad,
en este huerto que llamamos realidad
salvo quizá salir a sembrar verdades por las calles,
semillas de mentiras que fecunden callejones,
y sean sólidas ficciones antes de caer la noche.
Que no hay tanta prisa, que hay tiempo todavía
para sacar a pasear nuestros rebaños de temores y autoengaños,
de dejar pastar los miedos y las fantasías,
de cebar la pena y la alegría, de jugar y hacerse daño,
que a ningún sitio importante se puede llegar tarde,
ni se puede ir en tren ni avión, ni en carruaje
se llega andando, por uno mismo, paso a paso,
se llega cuando ha de llegarse, y es sabiendo todo esto
que dejo que el bus se marche, y termino mi café
antes que empiece a enfriarse y me pongo el reloj al revés,
para no olvidar jamás
que tengo el tiempo de mi parte.
Out past the fountain a left by the station,
ResponderEliminarI start the day in the usual way...
Then think "well why not?" and stop for a coffee,
then begin to recall things that you say...
("Wednesday", Tori Amos)
Me encanta. A veces hay que dejar escapar el tiempo, se valora pocos momentos por su culpa.
ResponderEliminarY me pongo el reloj al revés,
ResponderEliminarpara no olvidar jamás
que tengo el tiempo de mi parte.
Esa frase me ha marcado, hasta un punto que aún no alcanzo a entender. Es una de esas lineas que resuenan en la cabeza después de leerlas, que te marcan, te cambian, te hacen pensar hacia unos derroteros que no habías recorrido antes.
Gracias, de verdad.